El visitante sube a bordo de un antiguo vagón postal, un decorado de hace años, época en la que una carta echada al buzón por la tarde podía llegar… al día siguiente. Increíble, ¿no?
Este insólito museo ocupa el espacio de cinco vagones postales de un tren que se encuentra en la estación de Toulouse-Raynal. El museo evoca la historia de los envíos postales (por carretera, ferrocarril o avión) y de los ambulantes que trabajaban clasificando el correo a bordo de los vagones especiales entre 1857 y 1994.
Los voluntarios de la asociación que administra el museo han reunido todo tipo de material, equipamientos, documentos, impresos y fotos que narran la evolución de las tecnologías del sector.
Cada año se presenta una nueva exposición temporal. Actualmente está dedicada al papel del correo durante la guerra 1914-1918. Hay que mencionar una bella colección de sellos.