Paseos patrimoniales - Palacetes
Antes de la Revolución era básicamente la mansión urbana de un personaje importante donde vivía con su familia y servidumbre. Los locales dedicados al servicio estaban en las dependencias: las cuadras y los almacenes a un lado y al otro lo tocante a la alimentación. El visitante admira primero su monumental entrada para llegar a los aposentos privados, pasando, según la época, por la escalera de honor, la sala principal y los salones.
Son más de 200 palacetes o vestigios que van desde la Edad Media hasta principios del siglo XX, incluidos en los Sitios Patrimoniales Primordiales de Toulouse. Surgieron con los capitouls (consejeros municipales) y la alta sociedad mercantil y parlamentaria que contrataron a grandes arquitectos, sobre todo en los siglos XVI y XVII. Tras la Revolución, los artistas y los industriales copiaron el modelo que se convirtió en un patrón para los dueños de bellas mansiones.
Etapas
Esta morada que recuerda una mansión burguesa está en el solar del antiguo recinto canónico, destruido y remodelado tras la Revolución.
Si su fachada de la calle Sainte-Anne fue construida durante el Antiguo Régimen, la de la avenida François-Verdier tiene otro aspecto después del derribo de las murallas en los años 1830. La sensación de grandeza y la simetría del diseño, la presencia de dependencias con terraza superior le dan ese aspecto propio de un palacete. El decorado se concentra sobre todo en las alas : pilastras dóricas, friso de palmitas, frontones, etc. Los elementos de decoración de terracota moldeada vienen del catálogo de la fábrica de Virebent. Más allá del portón estaba el jardín, hoy boulevard, lo que antiguamente era la alameda que rodeaba la ciudad. Al pasar en el ala izquierda, hay que observar los aros de hierro en los muros que servían para atar a las caballerías.